Nombre Original: The Hudsucker Proxy
Director: Joel Coen
Guión: Joel Coen, Ethan Coen y Sam Raimi
Reparto: Tim Robbins, Jennifer Jason Leigh, Paul Newman, Charles Durning, John Mahoney y otros
Música: Carter Burwell
Duración:111´
País: Reino Unido
Año: 1994
Las industrias Hudsucker están generando gran cantidad de ganancias para sus inversores. Sin embargo, Waring Hudsucker decide que el dinero no le está haciendo feliz y en medio de una reunión en la sala de conferencias se lanza en una carrera hacia la ventana, cayendo 45 pisos de alto. El puro que había estado fumando no ha terminado de apagarse (literalmente) cuando Sidney Mussburger (Newman) ya está ocupando su lugar. Entre todos, deciden poner a un tonto en su lugar para mantener el control de la empresa. Y ese tonto resulta ser Norville Barnes (Robbins), quien a comenzado a trabajar en el correo interno de la compañía ese mismo día.
Después de “No country for old men” me entró la fiebre Coen y me decidí a ver tantas producciones suyas como fuese posible. El fin de semana pasado me topé con ésta, muy alejada de la ganadora del Oscar, pero más cerca del delirio que caracteriza a la filmografía de estos hermanos. “El gran salto” es una exageración a la enésima potencia de la locura que forma parte de oficinas y empresas y de la explotación de sus empleados, donde los ejecutivos tienen grandes y frías oficinas y los empleados parecen trabajar en minas de carbón; donde las cartas de entrega inmediata paralizan toda actividad hasta su entrega y a los empleados se les descuenta hasta el papel higiénico. Además, está ese elemento sobrenatural del destino que tanto me atrae. Me gustó muchísimo la música. Bien por Robbins y su cara de bobo; igual yo me quedo con Newman y la mesa de ejecutivos, a mi parecer lo más cómico del film.
Trailer: Reelz Channel
Fuente: IMDb
Cartel: Impawards
Después de “No country for old men” me entró la fiebre Coen y me decidí a ver tantas producciones suyas como fuese posible. El fin de semana pasado me topé con ésta, muy alejada de la ganadora del Oscar, pero más cerca del delirio que caracteriza a la filmografía de estos hermanos. “El gran salto” es una exageración a la enésima potencia de la locura que forma parte de oficinas y empresas y de la explotación de sus empleados, donde los ejecutivos tienen grandes y frías oficinas y los empleados parecen trabajar en minas de carbón; donde las cartas de entrega inmediata paralizan toda actividad hasta su entrega y a los empleados se les descuenta hasta el papel higiénico. Además, está ese elemento sobrenatural del destino que tanto me atrae. Me gustó muchísimo la música. Bien por Robbins y su cara de bobo; igual yo me quedo con Newman y la mesa de ejecutivos, a mi parecer lo más cómico del film.
Trailer: Reelz Channel
Fuente: IMDb
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